Villena, entre los municipios de la Comunidad Valenciana que menos invierte en atención social

Una decena de ayuntamientos valencianos, de localidades con más de 20.000 habitantes, invirtieron menos de 45,75 euros por ciudadano en atención social durante el 2019, el último año del que se puede analizar la inversión efectiva y su comparación con el ejercicio siguiente. 

Los directores de Servicios Sociales de España califican esta inversión de “pobre” para cubrir las necesidades de la ciudadanía.

Tres de estas localidades con un gasto social per cápita inferior a los 45,75 euros, son Requena, Moncada y Algemesí. Los tres municipios dedicaron un gasto tan sólo unos céntimos inferior a esta cifra, pero en el caso de Rojales o Villena, la diferencia es sustancial, destinaron cerca de 30 euros por vecino para cubrir las necesidades sociales de todo el 2019.

Más baja resulta aún la inversión en servicios sociales de Torrevieja, es la más baja de todos los pueblos auditados en la Comunidad Valenciana: 24,16 euros.
Son algunas de las conclusiones del ranking que, desde hace cuatro años, elabora la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales de España basándose en los datos de liquidación del presupuesto que las entidades locales presentan al Ministerio de Hacienda y que pueden consultarse en la Oficina Virtual para la Coordinación Financiera. 

En 2019 hasta diez ayuntamientos dedicaron a gasto social una cantidad considerada como “pobre”, de menos de 45,74 euros por ciudadano. La mitad de estos consistorios, los cinco que menos invirtieron en servicios sociales,-Torrevieja, Rojales, Villena y San Vicente del Raspeig- ya habían obtenido esta calificación en ediciones anteriores del estudio. Además, la Comunidad Valencia es la segunda autonomía con más consistorios con esta inversión, sólo por detrás de Madrid.
¿Por qué se han establecido los 45,74 euros de límite para considerar que se trata de un gasto “pobre”? “Por analogía con lo que las estadísticas de la Unión Europea. Estas estadísticas establecen la pobreza de las personas, en las que obtienen ingresos inferiores al 60% de la media de la renta de las personas del país. 

Por tanto, podemos considerar igualmente pobres en servicios sociales a los ayuntamientos con un presupuesto inferior al 60% de la media del gasto de los Ayuntamientos de más de 20.000 habitantes “, explican desde la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales de España.