Tenso Consejo Escolar Municipal por la supresión de la unidad de 3 años en el Jaquín María López

El Consejo Escolar Municipal de Villena, reunido con carácter extraordinario,  ha aplazado la aprobación y redacción de alegaciones al “arreglo escolar” del Consell Valenciano hasta el próximo 27 de diciembre. Fecha en que se volverán a reunir para consensuar las peticiones que desde la comunidad educativa villenense se envíen antes del  plazo fijado por la conselleria de Educación, el 2 de enero. Al mismo tiempo, el pleno municipal se ha sumando a la oposición expresada desde el órgano educativo.
Todos y cada uno de los sectores educativos de Villena han manifestado su rechazo contra la decisión de la conselleria de Educación de eliminar la única unidad de 3 años existente  en el colegio Joaquín María López. Pero, mientras desde otros centros educativos se apuesta por una declaración de intenciones frente a la conselleria de Educación para que paralice la propuesta, desde el Joaquín María López  -donde ven peligrar la continuidad del colegio- se quiere una “respuesta objetiva y clara a Educación”. Así, han planteado la supresión de la unidad de infantil en otro colegio donde haya dos. Sin embargo, la solución no ha sido del agrado de la directora del CEIP Ruperto Chapí, Cati Molina, cuando ha visto que la solución pasaba por su centro.
Con la presencia de los padres del Joaquín María López, el Consejo Escolar  Municipal se volvió tenso y en más de una ocasión, incluso se llegó al enfrentamiento verbal entre los representantes del ubicado en la zona alta de la ciudad  y los del  Ruperto Chapí. Para lograr llegar a un entendimiento el Consejo Escolar Municipal se reunirá, de nuevo, el día 27 de diciembre con un informe redactado por las direcciones de los colegios de primaria y así con datos poder razonar las alegaciones dadas a  Educación.
La disminución de la natalidad – 26 niños menos que el pasado año se matricularán en las unidades de infantil de 3 años el próximo curso, según el padrón municipal- sumado al incremento del número de niños por aula ha supuesto la necesidad de menos unidades, no sólo en la localidad, sino en toda la Comunidad Valenciana. Sin embargo, el apiñamiento de los pequeños en clases de hasta 30 alumnos no es bien visto por gran parte de la comunidad educativa.

Anuncio de la supresión de la unidad 3 del Joaquín María López