¿Primera Navidad?

  • 23 diciembre, 2024
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¿Primera Navidad?

De nuevo volvemos a estar a las puertas de otra navidad…

Sin darnos cuenta, entramos en la recta final de otro año que seguramente  comenzamos con muchos propósitos, proyectos e ilusiones.

Y como algo intrínseco del ser humano, nos da por hacer balance. Pero en realidad es algo necesario y recomendable. Pararnos y dedicarnos un tiempo a nosotros mismos; hacer una recapitulación; ver por dónde hemos venido, lo que hemos aprendido; a dónde queremos ir, pero, sobre todo: dónde estamos.

Para afrontar este trío de pasado-presente-futuro, lo ideal es hacerlo de una  forma constructiva. Emplear un diálogo interno positivo es fundamental para aprender de los errores del pasado (autocrítica), marcarnos metas realistas para el futuro (objetivos) y centrarnos en el presente de forma consciente.

Y el que tenemos ahora es el de la navidad, al que le quiero dedicar este artículo.

Elijo este título porque alberga dentro infinidad de primeras veces que se pueden vivir en estas fechas, algunas de las cuales, os voy a especificar a continuación. Eso sí, mirando siempre desde las gafas del positivismo.

  1. “No me gusta la navidad”. Hay muchas más personas de las que creemos a las que no les gustan estas fechas. Ya sea por nostalgia, aglomeraciones, exceso de decoración, obligaciones, consumismo… Si es tu caso, lo primero que puedes hacer es no sentirte mal por ello y aceptarte tal como eres. A partir de ahí, disfrutar estos días como más te guste: irte de vacaciones, rodearte de personas que te hagan sentir bien, aprovechar para hacer tus hobbies… Es tu tiempo, ¡decide qué hacer en él!
  • “La primera navidad sin estar con mi familia”. Puede que por motivos de trabajo o por estudiar fuera, no puedas volver a casa en estas fechas. En esta primera vez, priman la nostalgia y la tristeza por encima de cualquier emoción. Como siempre digo, las emociones hay que validarlas y acogerlas, por ello, lo primero es no evitarlas. Y lo segundo es usar los recursos que tenemos a nuestro alcance. Las tecnologías que tenemos hoy en día nos ayudan a sentirnos cerca aunque nos separen miles de kilómetros.
  • “La primera navidad con la familia política”. Si te has casado este año o has dado un paso más en tu relación, puede que las caras que veas alrededor de la mesa esta Nochebuena no sean las habituales. Deja a un lado tus costumbres, no compares y disfruta de lo nuevo, pues al final, si vas a vivir esta situación, es porque tu relación está consolidada y existe buena armonía con su familia. La ilusión para el cónyuge anfitrión es inmensa, así que olvídate del cuñado y conecta con tu pareja.  
  • “La primera navidad con niños”. Sin lugar a dudas, es la situación que lleva las gafas de la positividad sin necesidad de ponértelas. Ilusión a raudales; inocencia en estado puro; felicidad contagiosa; alegría; magia… Gracias a ellos volvemos a conectar con ese espíritu navideño y recuperamos a nuestro niño interior. Comenzando por la carta a Papá Noel y a los Reyes Magos; montar el árbol de navidad y el belén en casa; su cara de ilusión al ver la cabalgata;  el miedo con sabor a nervios al descubrir los reglaos… Contágiate y déjate llevar.
  • “La primera navidad sin ti”. Ese ti puede ser tu abuelo, tu abuela, tu madre, tu padre… Esa persona imprescindible en tu vida que este año ha fallecido y deja una silla vacía alrededor de la mesa y una tristeza profunda en tu corazón. Es uno de los momentos más duros a los que se puede enfrentar una persona tras la despedida previa. No evites esa pena y ese vacío, pues forman parte del proceso de duelo, pero canalízala. Abraza a quien sigue estando; recordar juntos a esa persona especial, con amor y cariño… Es el mejor homenaje que se puede hacer. Mantén vivo su legado y dale una nueva dimensión a su amor. Porque, ¿cómo crees que le gustaría verte?
  • “La primera Nochebuena, Nochevieja o Reyes sin mi hij@”. Quizás este año ha supuesto el fin de tu relación, y con ella el fin de una etapa. Pero si tienes hijos, por convenio o por mero acuerdo amistoso, alguno de estos días no te corresponderá pasarlo con ell@s. Para un padre o madre es un momento delicado por lo que estas fechas suponen. Independientemente de que hayas tomado tú la decisión o no, esta nueva realidad viene para mejorar la anterior, así que piensa en su bienestar y acompáñalo desde la distancia.

Sé que habrán muchas situaciones más, así como tantas maneras de afrontarlas como personas viviéndolas. Lo importante es tener autoconocimiento para saber cuál es nuestra situación, cómo somos y cuál es la mejor forma de transitarlas en función de nuestros sentimientos y nuestras necesidades.

Personalmente, esta navidad para mí va a tener varias primeras veces las cuales estoy deseando vivir.

Pero no quiero terminar sin hacer mención especial a que es mi primera navidad como colaboradora de este periódico. Me encanta escribir y aunque no lo hago tanto como me gustaría, espero que estos artículos os hagan reflexionar.

El movimiento personal comienza tras el cuestionamiento y este viene de la curiosidad y el conocimiento.

Os deseo una muy Feliz Navidad y un 2025 con mucha salud mental.

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