Peineta navideñas
- 23 diciembre, 2013
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El aforo de la Casa de la Cultura de Villena se quedó pequeño para dar cabida a uno de los actos más recientes de las fiestas de Moros y Cristianos: la entrega de las peinetas a las madrinas mayores e infantiles de las catorce comparsas. El presidente de la Junta Central de Fiestas (JCF), Antonio Navajas, acompañado de la concejala de Fiestas, Isabel Micó, entregó los adornos que las representantes de cada una de las comparsas lucirán en sus cabezas junto al traje de villenera de verano en los Moros y Cristianos.
En un típico ambiente navideño a la Regidora Mayor, Carolina Menor y a la infantil, Paz Sirera, el alcalde de la ciudad, Javier Esquembre, les impuso la banda que les acredita en sus cargos como las máximas representantes de las fiestas patronales. Asimismo, el presidente de la Junta de la Virgen, Antonio López repartió a las 15 jóvenes y 15 niñas que subieron al escenario, la insignia de la entidad mariana y les regaló un libro acerca de la historia del santuario de Nuestra Señora de Las Virtudes de Máximo García Luján.
El alcalde, en su discurso, recordó que «en un acto como éste se mezclan mayores e infantiles, distintas comparsas e incluso personas de distintas ideologías políticas, demostrando que en unidad las cosas salen mejor».
A la felicitación navideña de la primera autoridad local se sumaron las regidoras, quienes agradecieron la entrega de su banda al ayuntamiento «que es portadora de alegría, ilusión y orgullo».
Más reivindicativo fue el presidente de la Junta Central de Fiestas, Antonio Navajas, quien pidió que en 2014 las fiestas de Villena sean catalogadas de Interés Turístico Nacional, al tiempo que señaló que «creo que ya se lo merecen y no puede estar el expediente guardado en un cajón».
La entrega de peinetas ha sido la primera gala de la nueva Junta de Gobierno de la JCF. Así lo indicó Antonio Navajas, que hace poco inició su segundo mandato. El acto finalizó con un toque de humor con un monstruo verde vestido de Papa Noel, al que finalmente se le ablandó el corazón, y el baile de los duendes del personaje navideño.