Pedro Marco da la bienvenida al barrio del Rabal

La Plaza de Santa María se llenó ayer de amigos, vecinos y conocidos de Pedro Marco para ver, por primera vez, la escultura que, en su memoria, se ha ubicado en ella. No cabía un alfiler en un acto sencillo, pero con una gran carga de emotividad, prueba del cariño que los villeneros procesan al pintor. Marco ha sido profeta en su tierra y así se demostró en el homenaje que se le brindó tras su fallecimiento.

Alrededor de la escultura, todavía cubierta estuvieron las autoridades municipales y la familia de Pedro Marco. Abrió el acto el director de la Casa de la Cultura, Pepe Ayelo, quien glosó la figura del pintor y explicó el por qué de la elección del escultor que ha dado forma al busto bronce fundido. Ayelo destacó que “los dos artistas compartían espacio comunes como el gusto por lo onírico”. Además, recordó que “nos trae aquí el deseo de no olvidar”. De hecho la obra lleva por nombre: “El pintor de sueños”.

Tras las palabras del director de la Casa de la Cultura intervino el presidente de la Asociación de Vecinos del Rabal que destacó de su personalidad el hecho de que por muy lejos que se fuera siempre volvía a sus raíces, siempre volvía a Villena, siempre volvía al Rabal. Al mismo tiempo apuntó que “ha sido un honor tenerlo como vecino”.

Su yerno, Carlos Pérez, le dio voz a la familia contando una anécdota de sus primeros días con Pedro en Tabarca que reflejaba la compleja y a la vez sencilla y compleja personalidad de Marco.

En el acto hubo tiempo para las emociones. La música llegó de la mano del guitarrista Oscar Albuixech. El mismo regalo a la familia y en concreto a su primo, “Pedro hijo” una composición que compuso para el video de una exposición de su padre. Una pieza que nunca había trasladado a papel y que, con motivo del homenaje, escribió y le entregó.

También el autor de la obra dedicó unas palabras, pero el lo tuvo que hacer a través de un audio pues el covid-19 le impidió estar en Villena.

Poco antes de descubrir la escultura del Pedro, el alcalde, Fulgencio Cerdán, destacó las distintas facetas del pintor y su implicación en todos los aspectos sociales y culturales de la ciudad. Asimismo, indicó que Marco se había convertido en el cuarto vértice de Villena junto al agua, su patrimonio cultural y monumental y José María Soler.

Tras descorrer la tela que tapaba el busto fueron muchos los villeneros que quisieron hacerse sus fotos junto a la figura creada por Castejón y que refleja el poderoso mundo interior de un villenero, que guardaba para sí la quinta esencia de pertenecer a este pedazo de la tierra entre Picachos de Cabrera, la Sierra la Villa y los Cabezos.