Los vecinos de San Antón se aúnan para mantener la asociación

Los vecinos de San Antón se han unido para mantener viva la asociación y evitar su disolución, tal y como anunció hace unos días el presidente de la entidad, Pascual Pérez,  tras convocar la reglamentaria asamblea de elección de nueva junta directiva y no presentarse ninguna candidatura

Un grupo de ochos vecinos, ante el riesgo de desaparición de la asociación, decidió en el transcurso de la asamblea general que tuvo lugar el pasado miércoles, comenzar a trabajar y constituirse como junta directiva aunque dándose el plazo de dos semanas para repartir las funciones y los cargos que ostentarán. Por lo que hasta dentro de dos semanas no se dará a conocer el presidente de la nueva junta directiva de la asociación de vecinos de San Antón. Asimismo se acordó que con en las directivas entrantes debería estar integrada por una parte de los vecinos que formaban la junta saliente con el fin de que el traspaso de poderes sea el menos traumático y la continuidad de la gestión se asegure.

La asociación de vecinos se constituyó en 1995 con el fin de recuperar la ermita de San Antón que había sido declarada en ruina. El templo es uno de los inmuebles más visitados y queridos por los villenenses, puesto que alrededor del mismo se desarrollan los actos en honor a San Antón durante el mes de enero. El templo fue construido en el siglo XVI y documentos escritos acreditan que desde 1709 y coincidiendo con la onomástica de San Antón se organizan actividades en el mismo.

Los vecinos, además de restaurar la ermita, han trabajado durante años por mantener viva la tradición del encendido de la hoguera en la víspera de la festividad de San Antón, la venta y subasta de toñas, así como el desfile y bendición de animales, ya que la asociación es la que se encarga de la organización de los festejos en honor al santo durante el mes de enero. Asimismo, en los últimos años durante las fiestas en honor a San Antón, la asociación de vecinos ha introducido nuevas actividades, como teatro infantil o cuentacuentos alrededor de la hoguera, para acercar esta fiesta  al público infantil y continuar con la tradición.

La asociación de vecinos del barrio de San Antón ha trabajado de forma ingente en la conservación del patrimonio y la cultura local.