Las Fiestas de Moros y Cristianos son “orgullo villenero”

La pregonera de las fiestas de Moros y Cristianos de Villena, Mª Dolores Fenor declaró su amor a Villena en un discurso que emocionó a los numerosos festeros y vecinos de la localidad que se congregaron bajo del balcón del Ayuntamiento.
La profesora de historia en el IES Hermanos Amorós y directora de la Fundación José María Soler empezó con fuerza un pregón que denominó “Los Tesoros de Villena” con una clara referencia al conjunto áureo, que hace 50 años se encontró en la rambla del Panadero. Ya en los primeros minutos consiguió el aplauso de una plaza abarrotada al enviar “un recuerdo muy especial y un fuerte abrazo a los villeneros y villeneras ausentes cuyo corazón está ahora con nosotros”.
Fenor- como si en una de sus clases estuviese- pasó lista por apellidos  a los que han estado presentes en sus aulas,  a lo largo de sus casi cuatro décadas como profesores en el instituto de Villena. En ese instante, muchos de sus alumnos les brindaron su cariño en forma de aplauso.

A lo largo de su pregón utilizó las palabras de dos de los hijos predilectos de Villena, Alfredo Rojas y José María Soler, pero también las de un escritor Antonio Muñoz Molina con las que se declaró una enamorada de su ciudad de adopción desde que en 1976 llegó desde Lorca para ser profesora. Fenor hizo suyas las palabras: “el amor por una ciudad es tan inmediato, tan intuitivo, tan irrevocable, como el amor por una persona. Se huele en el aire, se percibe en la luz, en los primeros minutos de la primera llegada. El tiempo, los regresos, los periodos de ausencia, fortalecen su hondura”.
También agradeció al alcalde, con la emoción en la garganta que le hubiese dado la posibilidad de dar las gracias a la ciudad y al mismo tiempo señaló “aquí quiero y me siento querida”.
La pasión fue uno de los hilos conductores del discurso. La pasión por una tierra que muestra su grandeza a lo largo de la historia, en sus monumentos y con sus músicos, Ambrosio Cotés, Ruperto Chapí, Quintín Esquembre; sus escultores, Antonio Navarro Santafé; sus políticos, Joaquín María López y José María Soler, “tesoro de la Historia de Villena y arquitecto de la misma”.
La pregonera hizo una defensa a ultranza de los festejos patronales, “porque las Fiestas se viven y se sienten como arte, en el que diseñadores, estilistas, artesanos, modistas… trabajan para que luzcáis en los desfiles de vuestras comparsas y en las escuadras especiales; fraternidad, encuentro, reencuentro y diversión que se manifiestan a través de nuestras vivencias en la calle, en las comparsas, los locales, los cuartelillos, el Ateneo. En ellos se habla, se degustan las típicas comidas, se ríe, se hacen nuevas amistades y se baila siguiendo los acordes de la música festera”.
“Estas son nuestras Fiestas! Y merecen el máximo reconocimiento a nivel nacional e internacional” fue la reivindicación que dio por concluido el pregón con una gran ovación por parte del público.