La Junta Central de Fiestas abordará en mayo dos propuestas de cambio del programa de actos

La Junta Centras de Fiestas abordará las dos propuesta de cambio de programa de actos que se han presentado en una asamblea que tendrá lugar a mediados del mes de mayo. El presidente de la entidad festera, Luís Sirera, indica que por un lado se votará la iniciativa presentada por la junta directiva  en la que plantea principalmente, eliminar la Retreta el día 7 de septiembre y trasladar el acto al 3 tras las Entraicas, así como crear dos Cabalgatas, el día 6 para el bando cristiano y el 7 para el bando moro. El desfile de La Esperanza se trasladaría a la tarde del día 6 y la Embajada se desarrollaría durante la mañana de esta jornada.

La otra propuesta es la presentada por las comparsas de Cristianos y Ballesteros en las que se propone la eliminación del Contrabando el día 7 para realizar por la tarde el desfile de La Esperanza y trasladarlo el día 6 a las 5.30 horas (El Contrabando) así como el adelanto del desfile de La Cabalgata a las 8 de la tarde.

Luis Sirera indicó que la directiva de la JCF creó una comisión para analizar y valorar los tres grandes problemas de las fiestas locales. Por un lado las altas temperaturas que soportan los niños durante el desfile infantil de La Esperanza lo que provoca desmayos por golpe de calor, por otro la excesiva duración del desfile de La Cabalgata que acaba sobre las 5 de la mañana, «e incluso hay bandas que han planteado no tocar a esas horas. Y por otro lado la Retreta se ha desvirtuado y en la mayoría de los casos se ha eliminado el factor crítico del desfile, hay muchas comparsas que no tienen a socios que participen en al misma y por otro lado se ha convertido en un botellón, por lo que creemos que no debemos de fomentar este aspecto dentro de la fiesta», afirma el presidente de la Junta Central.

Cualquiera de las dos propuestas si se aprueba por mayoría simple por la asamblea de la JCF saldrá adelante y se aplicarán los cambios las próximas fiestas de Moros y Cristianos. Así el presidente indicó que las modificaciones podrán ser revocadas dentro de tres años, si así lo considera la asamblea.

Luis Sirera señala que los cambios planteados no son fruto de la improvisación, sino de un estudio y una actitud valiente por mejorar las fiestas de Moros y Cristianos de la localidad.