Hoy todavía es siempre

Natalia Ruiz

Hoy es siempre todavía. Toda la vida es ahora. Y ahora es el momento de cumplir las promesas que nos hicimos. Porque ayer no lo hicimos, porque mañana es tarde.”

Tal como nos recuerda el poema de Antonio Machado, toda la vida es ahora. Una invitación a vivir el momento presente, a abandonar el No puedo y centrarse en lo que SI puedo, que todavía, y afortunadamente, es mucho.

Vamos a vivir un segundo año sin fiestas, un septiembre huérfano de alegría y color en las calles, de olor a pólvora y tribunas. Sin embargo, muchas de las cosas que nos hacen disfrutar de nuestras fiestas patronales siguen estando ahí, de forma diferente, pero todavía están ahí. No dejemos de disfrutarlas por aferrarnos al pasado ni posponerlas para el futuro.
Todavía podemos perfumar nuestro hogar con alábega, aderezar las sobremesas con nuestras pasticas y licores, alegrar nuestro día con marchas moras y pasodobles, darnos un homenaje con pimientos, huevos y sardinas regado de un buen vino de nuestra cooperativa.

Todavía tenemos con quien pasear de la mano, tomar un blanco y negro en el paseo, visitar a nuestra Morenica en Santiago, disfrutar de una buena cena el día 4.

Todavía nos queda la esencia de nuestra fiesta, todavía tenemos vida.
Esta pandemia nos sigue brindando la oportunidad de aprender a fluir con la vida, vivir el presente y agradecer lo bueno que nos sucede. Una de las claves que nos ayudará a conseguirlo es el uso del lenguaje positivo, en concreto hoy te propongo que pruebes el poder de la palabra TODAVÍA.
Nos quedan muchos todavías con los que acompañar estos días.

Te invito a que encuentres tus todavía, con el deseo de que vivas unas “no fiestas” de forma menos nostálgica, más constructiva, positiva y feliz