El asilo, la transformación de un edificio en un hogar sostenible

Bajo el compromiso de GESTASER Obras y Servicios, la rehabilitación y ampliación de la Residencia Hogar Virgen de las Virtudes ha logrado combinar la preservación de un patrimonio histórico con la creación de instalaciones modernas que aseguran la máxima calidad de vida para sus residentes.
Este ambicioso proyecto, dividido en varias fases, se presenta como un modelo de convivencia y sostenibilidad, garantizando el confort y bienestar de los ancianos.

Hace unos días, la comisión pro restauración del asilo invitó a la ciudadanía a unas jornadas de puertas abiertas, que suscitaron gran interés. En solo dos días, 1.406 personas visitaron las instalaciones, lo que demuestra el entusiasmo y apoyo por este proyecto.

Actualmente, los 47 residentes que habitan el centro se incrementarán a 99 a principios del próximo año (aunque ya existe una amplia lista de espera), y el equipo de trabajadores, que en este momento consta de 23 empleados, seguirá creciendo.

Una obra de gran envergadura

Las obras del asilo comenzaron en 2017, con las primeras intervenciones para estabilizar el terreno mediante el hincado de pilotes de cimentación de hasta 22 metros de profundidad. Este trabajo preliminar garantizó una base sólida para los desarrollos posteriores.

Las primeras fases se centraron en la construcción de un nuevo bloque residencial, ampliando considerablemente la capacidad del asilo, pasando de una capacidad limitada a un complejo con espacio para 99 residentes.

Además, se crearon modernas salas de instalaciones, con sistemas eléctricos, hidráulicos y de prevención de incendios que aseguran el funcionamiento adecuado del complejo.Se han incorporado áreas comunes como gimnasios, comedores, salas de teatro y un oratorio, garantizando espacios para el ocio y la espiritualidad de los residentes.

Asimismo, se ha rehabilitado el Pabellón, el edificio más alto del centro, que también se destina a uso habitacional, mejorando tanto sus prestaciones iniciales como su adaptación a las normativas hospitalarias y de accesibilidad.

Una residencia adaptada a las necesidades del siglo XXI

La última fase se centró en la rehabilitación integral del complejo, con la adición de 45 habitaciones en suite.

A medida que el complejo crecía, también lo hacían las comodidades que ofrece. Además de las áreas residenciales, se han incorporado espacios de servicio como una cafetería, una sala de peluquería y una sala de podología, asegurando que todos los aspectos de la salud y el bienestar de los residentes estén cubiertos.

La rehabilitación no solo se centra en el interior de los edificios, sino también en el entorno exterior. Las actuaciones de urbanización, jardinería y acondicionamiento del espacio libre de la parcela están pensadas para integrar la naturaleza en el día a día de los residentes.

El diseño de los jardines y los espacios al aire libre busca promover el bienestar emocional de los ancianos, proporcionándoles un entorno relajante y agradable para su recreo y descanso.

Sostenibilidad y eficiencia energética

Una de las características más innovadoras del proyecto es su enfoque en la sostenibilidad.

El complejo está dotado de sistemas de autoconsumo energético, con paneles solares que permitirán cubrir parte de sus necesidades energéticas. Además, se han implementado sistemas de recogida y aprovechamiento de aguas pluviales, reduciendo así su impacto ambiental y fomentando el uso responsable de los recursos.

Con la implementación de estas medidas sostenibles, la Residencia Hogar Virgen de las Virtudes no solo se convierte en un lugar de referencia para el cuidado de ancianos, sino también en un ejemplo de cómo las construcciones del futuro pueden ser respetuosas con el medio ambiente y con las necesidades de sus habitantes.

Un patrimonio único

Una de las partes más destacadas de este proyecto es la rehabilitación del Palacio de la Familia Mergelina, una joya arquitectónica del siglo XVII, que incluirá la restauración de su fachada barroca.

Este edificio es un símbolo de la historia local, y su rehabilitación no solo preserva su valor patrimonial, sino que lo integra en un proyecto más amplio que combina el pasado con el futuro.

Entre los elementos que se restaurarán se encuentran pavimentos de mármol blanco italiano procedentes de la familia de los Carrara, así como baldosas Noia del siglo XIX, que aportan un toque de elegancia y distinción a la edificación.

Un hogar para los mayores

El proyecto liderado por Gestaser para la Residencia Hogar Virgen de las Virtudes es un centro de excelencia, con capacidad para albergar hasta 99 personas mayores, que podrán disfrutar de todas las comodidades y servicios de un hogar moderno. La residencia no solo será un lugar para vivir, sino un hogar donde el confort y la sostenibilidad conviven para proporcionar una vida digna y plena a quienes han dado tanto a nuestra sociedad.

El compromiso con el bienestar de los mayores, la restauración de un patrimonio único y el respeto por el medio ambiente hacen de este proyecto un ejemplo de modernidad y sensibilidad social.

El trabajo de rehabilitación y ampliación es un ejemplo de cómo la modernización y la conservación del patrimonio pueden ir de la mano para crear espacios que respeten la memoria mientras ofrecen la mejor calidad de vida a los residentes. Un proyecto de gran envergadura que, con el paso de los años, se consolidará como un modelo de cuidado y sostenibilidad.