Despertemos, que no va de broma: el homo sedentarius

El próximo día 21 marzo, a las 20.30 h, en el salón de actos del Colegio Príncipe se celebra una conferencia titulada “La salud de tu hijo en tus manos: nutrición y actividad física”  coorganizada por el colegio y Profesport y cuyo objetivo es que José María Fernández, Noemí Bañón y Julián Calero puedan dar unas pautas a padres y madres de toda Villena en relación a estos temas

Médicos, pediatras, terapeutas, enfermeros, auxiliares, nutricionistas, farmacéuticos, preparadores físicos de Villena y el resto de España están alarmados por las numerosas consultas por problemas de salud asociados a niños y niñas con sobrepeso y obesidad, conocedores de las repercusiones que en el presente y futuro conllevan estas enfermedades.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad y el sobrepeso han alcanzado caracteres de epidemia a nivel mundial. Las cifras asustan. Más de mil millones de personas adultas tienen sobrepeso y, de ellas, al menos 300 millones son obesas. En cuanto a la obesidad infantil en España es espectacular y preocupante: si hace 15 años, el 5 por ciento de los niños españoles eran obesos, esta proporción es ahora del 16 por ciento entre menores de 6 a 12 años. En la Unión Europea, sólo Gran Bretaña nos supera.

Esa es la parte visible y mesurable, según datos oficiales, pero hay que tener presente que hay un alto número de niños que aunque no acumulen exceso de tejido adiposo (grasa), no comen bien y no tienen buenos hábitos, con lo cual son personas en posible riesgo no sólo de tener sobrepeso, sino de padecer trastornos alimentarios como la anorexia o la bulimia.

Pero ¿cuáles son las principales causas de esta epidemia? Los niños comen mal y se mueven poco. Efectivamente, además de que muchos niños comen lo que no les beneficia en cantidad y en calidad, el sobrepeso y la obesidad se está asociando cada vez más con niños que no se mueven a lo largo del día. El sedentarismo está haciendo que nuestros pequeños y jóvenes estén menos tiempo en los parques, menos tiempo jugando a juegos que impliquen movimiento y desplazamiento, menos tiempo desplazándose andando, etc, sustituyendo a las actividades que tradicionalmente han quemado calorías por otras que no lo hacen.

¿Las soluciones? Está claro: educar. Cambiar la mentalidad. Valorar que si se encuentra tiempo para otras cosas, hay que encontrar tiempo para prevenir. Si queremos realmente a nuestros hijos y nietos hemos de ocuparnos de su salud y eso obligatoriamente pasa por una correcta alimentación y actividad física. Así que habrá que encontrar tiempo para sentarse con ellos a comer, para limitarles alimentos hipercalóricos y poco nutritivos o sencillamente para acompañarlos al parque y jugar con ellos.

Una persona con kilos de más no significa que no vaya a ser feliz. Igual que una persona con su peso ideal no significa que lo sea. Ahora bien, cuando esos kilos de más están asociados a problemas como el colesterol, diabetes, hipertensión, falta de movilidad…  ahí hemos de llevar cuidado, porque por mucho dinero, trabajo o amor que enriquezca nuestras vidas, estaremos enfermos. Así que despertemos, ayudemos, concienciemos a los que nos rodean, porque no es para reírse. Llevar estilos de vida activos y saludables nos ayudará a encontrarnos mejor ahora y siempre.