Deficiencias estructurales en el colegio Santa Teresa de Villena obliga a trasladar a los alumnos al Ruperto Chapí y la EPA

Las patologías estructurales detectadas en el edificio del colegio Santa Teresa de Villena ha obligado a trasladar a los alumnos de Infantil y Primaria, el próximo curso escolar, a diversas aulas del colegio Ruperto Chapí y de la EPA (Escuela para Adultos), tal y como ha comentado la edil de Educación, María Server.

De este modo, y hasta que se instalen las aulas prefabricadas en el patio del colegio Santa Teresa, 87 alumnos con edades comprendidas entre 2 y 12 años, cursarán sus estudios en aulas del colegio Ruperto Chapí y de la EPA. “Cada curso tendrá una clase y estarán los mismos profesores del año pasado. Las familias están informadas, ya que se pondrá a disposición de los alumnos transporte para los traslados. Además, se mantiene el servicio de comedor en el colegio Santa Teresa y se continuará con el protocolo para acabar con el absentismo”, ha explicado la directora del centro, Maite Sanz.

Por otro lado, el alcalde de Villena Fulgencio Cerdán, ha subrayado que Conselleria construirá un nuevo centro educativo en el barrio San Francisco al detectar problemas estructurales en los dos edificios de los que consta el centro. Asimismo, espera que antes de que finalice el próximo curso escolar estén instaladas las aulas prefabricadas. “Nuestro temor era que si dispersábamos al al alumnado por otros colegios podría desaparecer finalmente este centro el cual consideramos necesaria su existencia para el desarrollo del alumnado y de la barriada”, ha manifestado la primera autoridad local.

Tanto el director general de Educación, David Vento, como al inspectora de Educación, Luisa Pérez, han agradecido a los directores y equipos directivos del colegio Ruperto Chapí y de la EPA su colaboración y disposición para que el traslado de los alumnos de Santa Teresa se lleve a cabo.