Confederación Hidrográfica del Júcar prohíbe verter cualquier residuo a la Acequia del Rey

  • 15 enero, 2010
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Confederación Hidrográfica del Júcar prohíbe verter cualquier residuo a la Acequia del Rey

La Confederación Hidrográfiac del Júcar en un requerimiento realizado a la comunidad de vertidos del Alto Vinalopó integrada por los municipios de Villena, Canyada, Beneixama y Camp de Mirra ha prohibido el vertido de aguas residuales y de la depuradora a la Acequia del Rey, tanto al cauce, al suelo y subsuelo, si no se tiene una autorización expresa de la Confederación.

Además, se ha abierto un expediente sancionador a esta comunidad y si en el plazo de 10 días no se soluciona el  problema de vertidos de aguas “altamente contaminantes” se impondrá una sanción que oscilan entre los 6.000  y los 600.000 €.

La portavoz de Los Verdes, Catalina Hernández, ha señalado que los vecinos de la zona de la Acequia del Rey vienen denunciando irregularidades desde hacer meses, sin que por parte de los representantes  políticos que tiene poder de gestión- “Celia Lledó, Mª Paz Poveda y Virtudes Amorós”- se le haya dado ninguna explicación, “haciendo oídos sordos al problema”.

Indica que la analítica realizada por Confederación de las aguas de la Acequia el Rey establece como valor límite  de emisión autorizados en los parámetros microbiológicos de 200 y en el caso de la Acequia llegan a 10.000.

Recuerda que en el año 2007 se licitaron las obras del tratamiento de terciarios en la depuradora por parte de EPSA (entidad pública de saneamiento), “pero todavía no han comenzado las obras”. Instalaciones que mejoraría la depuración de las aguas de la depuradora.

Ante esta situación Los Verdes van a solicitar en el próximo Pleno que sea EPSA la que asuma el coste de la multa que deberá pagar la comunidad de vertidos del Alto Vinalopó, “porque en 9 días no se va a solucionar el problema de las aguas depuradas. Así que comiencen las obras de tratamiento de terciarios de forma urgente”.

Catalina Hernández señala que lo grave de este asunto es que los dirigentes, en este caso alcaldesa y Generalitat, no han garantizado los servicios públicos básicos, como la depuración de aguas, “que en este caso puede acarrear problemas sanitarios, que pude contaminar los cultivos por filtraciones de las aguas altamente contaminadas y lo que es evidente ha provocado problemas medioambientales, como la desaparición del fartell, una especie en peligro de extinción”.

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