El Ayuntamiento de Villena reparará un tramo de la calle Ramón y Cajal
- 5 junio, 2018
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La brigada de Obras del Ayuntamiento de Villena y operarios de la empresa Gestaser procederán a la reparación del tramo de la calle Ramón y Cajal que abarca desde la calle Párroco Azorín hasta la plaza de Santiago, tal y como anunció la portavoz del equipo de gobierno de Los Verdes, Catalina Hernández.
La edil comunicó que la junta de gobierno local aprobó el destinar las mejoras correspondientes a las obras que han concluido de reurbanización de la calle San Antón- en el tramo que abarca entre las calle José Zapater y Oscar Esplá- en el arreglo del pavimento de la calle Ramón y Cajal. Así indicó que el presupuesto para la compra de materiales de la obra asciende a 2.402 euros. En la adecuación la brigada de Obras procederá a la retirada de los adoquines que estén en mal estado, y los trabajadores de la empresa adjudicataria de las obras de San Antón arreglarán el pavimento. Hernández insistió en que no se va a proceder a levantar todo el adoquinado, sino sólo el que se encuentre en peor estado.
Hace un mes el PSOE denunciaba públicamente el mal estado en el que se encontraba la calle Ramón y Cajal de Villena que se reurbanizó en 2010 y solicitaba al equipo de gobierno de Los Verdes que investigase las causas de los distintos hundimientos de la calzada y se estableciese quién debía pagar los gastos de la reparación. Hace una semana se procedió a la retirada de los adoquines sueltos y a rellenar la zona para evitar caídas.
La concejala de Urbanismo y portavoz del gobierno municipal, Catalina Hernández, explicó que si no se ha reclamado a la adjudicataria de las obras de la calle Ramón y Cajal la reparación de los daños es porque los trabajos no están en garantía.
Una de las principales amenazas de conservación de esta calzada es el tránsito de vehículos pesados. A pesar de que el Ayuntamiento dispone de un proyecto de peatonalización del casco antiguo de la ciudad, lo cierto es que todavía no se ha puesto en marcha al parecer por la falta de un sistema informático que coordine todo el sistema de control y seguridad de los vehículos que discurran por el mismo.