Antonio Martínez: “Cada pregón tiene un componente personal indudable ”

Antonio Martínez Puche es profesor de la Universidad de Alicante, pertenece a la comparsa de Moros Nuevos, aunque cuando era pequeño y siguiendo la tradición de su abuelo,  desfiló de Contrabandista. Ha sido director de la Sede Universitaria y durante tres años integrante de la Junta Central de Fiestas. Ahora asume el cargo del pregonero, justo el año en el que vuelven los Moros y Cristianos tras una dura pandemia.

P. ¿Cómo y cuándo te  propone el alcalde ser pregonero y que tardas en dar el sí?

R. Hace un año y medio que se viene pensando y barruntado sobre esa posibilidad. Pero, realmente cuando se empieza a materializar es a principio de año, cuando ya se va viendo que están surgiendo las fiestas en otros municipios. Al principio no me lo tomo como un halago.

Sin embargo,  van pasando las semanas y hay que confirmarlo y el alcalde me insiste para que tome una decisión y surgen las dudas. Y al final, después de pensarlo mucho dije que sí. Mis dudas surgen por el contexto, por la responsabilidad y porque yo no soy  festero de raigambre. Me he hecho festero con el tiempo.De alguna manera, amo y tengo una perspectiva de la fiesta complementaria a la que pueden tener otras personas.

Reconozco que es un verdadero honor y un privilegio. Y como villenero, festero y también, porque amo mucho la fiesta, desde una perspectiva más allá de lo tradicional, al final asumo la responsabilidad de hacer un pregón.

Han pasado dos años y fiestas y hay un componente emocional muy fuerte. Y, la pandemía nos ha pasado factura a todos, seamos festeros o no, y eso habrá que reflejarlo de alguna manera. Así, el hecho de elegirme como pregonero lo  entiendo como un privilegio, pero también como un responsabilidad y hasta cierto punto como un reto.

P.¿Vas a ser el primer pregonero postpandemia y eso hace que la responsabilidad sea doble?

R. Sí, sí. Por eso he estado consultando otros pregones y con una persona que también fue pregonero como es José Fernando Domene, para dar algún apunte de carácter histórico en ese sentido, porque también creo que hay que incluir algún apunte vinculado a nuestra propia historia. Y sí, creo que el momento y el contexto obliga a tener un pregón a la altura de las circunstancias.

R.Antonio perteneces a la comparsa de Moros Nuevos, que parece ser una comparsa de pregoneros, ¿esto también pone el listón alto?

P. No, yo creo que no, esto es circunstancial.  Pero curioso sí es.

P. Cada uno de los pregoneros ha puesto su particular sello al pregón, ¿Qué sello llevará el tuyo?

R. Cada pregón tiene un componente personal indudable. El mio también lo tendrá porque las fiestas a mí me tocan muy de cerca por diferentes circunstancias personales, desde la muerte de mi padre hasta, el noviazgo con mi mujer que también fue en el contexto de fiesta. Es decir, las fiestas tienen un componente más allá de lo que es la fiesta, muy, muy personal, Suponen un inicio de ciclo, los que somos docentes también lo entendemos mucho. Son el final del verano y el inicio del curso.

P. ¿Será un pregón más emocional, más histórico, más….?

R. En la Junta Central de Fiesta hemos impulsado proyectos como el de las fiestas inteligentes, con la revalorización de los aspectos culturales, que son importantes.

También hay aspectos que creo que habrá que poner encima de la mesa como el tema económico. Me ha tocado dirigir a algún trabajo, fin de máster y algún trabajo de fin de grado vinculado a la importancia que tienen la fiesta y la economía. En concreto, estudiamos la  cuestión del microcluster festero y vimos que Villena es líder a nivel nacional en este sentido, en la concentración de empresas, no tanto matrices como auxiliares.

Otro aspecto a valorar es el reconocimiento de Fiestas de Interés Turístico Nacional, que en España tampoco hay tantas y no le damos el valor que tiene. Creo que el valor que tiene más allá de la etiqueta, creo que hay detrás muchas cosas.

Creo que, en el pregón, hay que poner encima de la mesa la parte emocional y la parte también de lo que aporta. Las fiestas aportan mucho y de  eso, a veces no somos suficientemente conscientes.

P ¿En la anterior legislatura con Luis Sirera como presidente, fuiste parte de la Junta Central de Fiestas ¿Qué tal la experiencia?

R.  También he pensado reflejar en mi pregón la importancia que tiene la gente que trabaja por la fiesta de una manera totalmente altruista y de manera anónima.

Y cuando estás dentro con alguna responsabilidad, no solamente la Junta Central, sino cualquier comparsa, ves cómo se trabaja.  Tienes que no desfilar porque estás controlando los desfiles, te pegas madrugones porque tienes que señalizar para el tema de la pólvora, porque tienes que ir el día o varios días. Tienes que atender el tema de los permisos, de la burocracia, el papeleo, y eso no se ve. Los festeros cogen el arcabuz, pero detrás hay gente que está trabajando para que eso se pueda hacer y se generen las condiciones.

Es cuando estás en la Junta Central de Fiestas o en la directiva de una comparsa cuando te das cuenta, sobre todo,  el valor que tiene.