AAP denuncia la creciente demanda de animales exóticos como mascotas
- 9 diciembre, 2021
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En el último mes, la Fundación AAP en Villena ha recibido varias entradas de animales exóticos procedentes del mascotismo. Entre ellos trece kinkajúes procedentes de un criador ilegal, una pantera, 5 caracales y un mono tití procedentes de particulares. Todos ellos incautados por las autoridades y con procesos judiciales abiertos.
El decomiso de los trece kinkajúes es particularmente llamativo, ya que es realmente asombroso que haya personas que tengan a estos animales como mascotas. Aunque su apariencia puede parecer la de un pequeño mono en realidad no son primates sino mamíferos carnívoros parientes de los mapaches (especie altamente invasora y potencialmente agresiva). “Es realmente triste que estos animales, que en México se encuentra sujetos a Protección Especial, hayan sido extraídos de la naturaleza, criados en cautividad y vendidos a través de “milanuncios” simplemente para el enriquecimiento de unos criadores sin escrúpulos.“ Se lamenta Rosa Chaparro, portavoz de AAP.
“Hacía tiempo que no nos llegaba un caso tan triste y complicado en su cuidado. Después de hacerles la revisión veterinaria a los 13 kinkajúes decomisados, realmente nos ha sorprendido su estado y la omisión de cuidados básicos. Por ejemplo, tienen varios tipos de parásitos y heridas abiertas, medicarlos va a ser muy complicado por sus hábitos nocturnos y su nivel de agresividad. A la mayoría les faltan falanges en los dedos, tiene cicatrices de heridas antiguas y hemos tenido que separar al grupo grande de hembras porque el nivel de estrés era muy alto. No son animales de hábitos sociales, sueles vivir solitarios o en parejas, excepto en el caso de los juveniles, así que al estar hacinados eran obligados a vivir en una situación de alto estrés y riesgo de agresiones, como así demuestran sus heridas recientes y cicatrices antiguas.
Son animales nocturnos a los que invierten el ciclo para poder tenerlos como mascotas, su visión no está adaptada a la luz del día y son forzados a mantener su actividad cuando sus dueños decidan, algo que es totalmente antinatural y por qué no decirlo, un tipo de maltrato… Además su cuidado no está exento de riesgo ya que son muy territoriales y pueden atacar a sus cuidadores si se ven amenazados.” Cuenta Olga Bellón, Responsable del Área de Primates y Pequeños Mamíferos en AAP, sobre el estado de esta reciente entrada de animales en el centro.
Respecto a los caracales o linces africanos (como suelen ser llamados) tampoco son animales doméstico sino felinos salvajes que donde mejor están es en su hábitat, los desiertos y sabanas de la Península Arábiga, Asia Central y partes de África. “Contrariamente a lo que pueda parecer es un cazador feroz que puede llegar hasta los 20 kilos de peso y es capaz de derribar animales mucho más grandes que él mismo, como por ejemplo gacelas de casi un metro de alto. Hay que tener en cuenta que aunque han sido utilizados para la caza desde la época del antiguo Egipto no son animales que hayan sido domesticados como los perros, esto quiere decir que cuando juegan e interactúan lo hacen en sus propios términos y pueden llegar a ser destructivos e incluso peligrosos. Si aun sabiendo esto, hay personas que siguen pensando que tener un caracal como mascota es apropiado deberían pensar en el daño que la cautividad ocasiona a estos bellos animales. Desafortunadamente estamos acostumbrados a recibir animales que llegan a nuestras instalaciones con traumas psicológicos, en su mayoría irrecuperables, provenientes del mascotismo. Una casa definitivamente nunca será el lugar apropiado para un caracal.” Comenta Pablo Delgado, Especialista en Grandes Felinos en AAP.
La entrada del último primate, un mono Titi proveniente de un particular en Marbella (Málaga), no es algo que sorprenda particularmente a la Fundación AAP debido a la cantidad de este tipo de casos. “Aunque es un primate que está en peligro de extinción y son animales que nos son domésticos, sorprendentemente no hay una prohibición total de su tenencia como animal de compañía en nuestro país, como así lo demuestran diferentes animales de esta especie de los que nos hemos hecho cargo a lo largo de los últimos años” Comenta Marta Merchán, Directora de AAP España.
Finalmente y quizá el más sorprendente sea el caso de una pantera, un leopardo negro al que ,increíble pero cierto, fue decomisado por las autoridades letonas tras ser encontrado malviviendo ilegalmente y con sus uñas amputadas en una habitación de un apartamento en la capital de Riga y cuyo viaje desde Letonia a España ha causado gran expectación en las redes sociales de la fundación.