Primeros compases

Según los carteles, las Fiestas comienzan el día 4, con la llegada de los primeros actos oficiales. Para la gran mayoría, no son Fiestas hasta que el pregonero/a de turno proclama a los cuatro vientos con orgullo: “¡¡¡Viva Villena!!!… ¡¡¡Viva la Virgen de las Virtudes!!!”. Para entonces, algunos llevan de fiesta – y probablemente, de algo más – desde el día 1.

Los buenos festeros reconocen que realmente se sienten en Fiestas justo antes de empezar “La Entrada”, cuando el bombo de la Banda Municipal de Villena avisa con esos 2 golpes a un público expectante, dando paso a ese momento mágico en el que el Director índica a sus pupilos que comiencen a tocar el tan esperado pasodoble de Quintín Esquembre. Seáis festeros o no, es algo especial que merece la pena presenciar.

La Banda comienza a desfilar por la Calle Nueva ante un público totalmente entregado, que aplaude su paso con una calurosa ovación. Mientras los veo marchar con la mirada, la voz del organizador de los Moros por megafonía me trae de vuelta a la realidad: “¡¡Que vaya formando el primer bloque masculino con El Tito… y la Lira detrás!!”. Me resulta extraño no escuchar la voz del Sultán buscando a gritos a la Banda de Bolbaite, pero “la fiesta la hacemos todos los festeros”, y supongo que todos tenemos que arrimar el hombro.

Apuro los últimos sorbos del cubalibre viendo salir a los primeros bloques femeninos. ¿Nos habrán llamado para formar? Empiezo a buscar alguna mochila conocida que me ubique dentro del desfile: “¡¡Acho!!, ¿¿Dónde te habías metío?? Los primeros saludos y regañinas por la tardanza – como siempre – dan paso a las preguntas clásicas de un Día 5: “¿Como acabasteis anoche?” “Nos metemos en el bloque del Bolo, ¿no?” “¿Somos menos que el año pasado o me lo parece a mí?”.

Aquellos que faltan comienzan a salir de “hasta debajo de las piedras” cuando por megafonía nos llaman a formar en la mitad de la Avda. de Elche: ¡¡La banda, que empiece a marcar el paso!! Dentro de nuestro pequeño caos, nos organizamos como podemos: ¡¡Aquí no vamos a oír la música!! …¿Y si nos vamos al fondo?Recibimos los primeros compases del 150 con el pico en alto… ¡¡¡Por fin empiezan mis fiestas!!!