Villena clausura las Fiestas del Medievo más internacionales

Villena clausuró ayer las Fiestas del Medievo más participativas e internacionales de los últimos años, de hecho ha sido la primera edición en la que oriente y occidente se han unido tras la celebración de una boda medieval por una pareja de novios chinos.

La asociación de vecinos del Rabal inició hace quince años las Fiestas del Medievo en el casco antiguo, con la recreación de la vida en los siglos XIV  y XV. El objetivo era acercar el barrio a los villenenses, atraerlos para que transitasen por sus angostas calles, para que conociesen el origen e  historia de la ciudad.  Con el paso de los años, los vecinos del Rabal han conseguido su objetivo y se ha superado puesto que no sólo los villenenses se acercaron a degustar las tradicionales tortas fritas que elaboran la asociación de la ermita de San José- elaboraron 6.970-, también lo hicieron ciudadanos de poblaciones de la comarca y del extranjero.

Más de 70.000 personas- turistas chinos, mexicanos,  alemanes, finlandeses, holandeses, así como treinta estudiantes Erasmus de las Universidades de Alicante y Murcia procedentes de  Estados Unidos,  Argentina, Reino Unido, Portugal, Brasil y Chile- se desplazaron a lo largo del fin de semana al barrio del Rabal,  para conocer el rico patrimonio cultural y gastronómico de la población. Así pudieron disfrutar de un centenar de espectáculos- teatros, danzas, música, combates medievales, magia, talleres- que con motivo de las celebraciones medievales cuarenta grupos fueron desarrollando.

El éxito de estas fiestas, tal y como el presidente de la asociación de vecinos del Rabal, Pepe Cabanes, subrayó estriba en la implicación de toda la ciudad para su desarrollo.