Retrato de una artista. El paisaje interior de la pintora Leyla Kucukalic

  • 18 noviembre, 2015
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Retrato de una artista. El paisaje interior de la pintora Leyla Kucukalic

Leyla Kucukalic es una artista bosnia afincada en Villena desde hace 23 años. Estos días expone su obra “Mi paisaje interior” dentro del marco de la exposición colectiva de la Asociación Artekarana que se puede visitar en el Círculo Agrícola Villenense hasta finales de noviembre.

El cuadro de esta artista formada en las facultades de Bellas Artes de Madrid y Valencia entre otras, representa un autorretrato intenso, casi andrógino tras el que se vislumbra un amplio paisaje amarillento, similar a una estepa coronada por dos maravillosas ventanas andalusíes que nos transportan a la Alhambra. La artista lleva años interesándose por los vestigios arquitectónicos en su obra. Los castillos de la comarca han engrosado todo un ciclo pictórico para esta pintora que ha establecido un puente con su país natal tan alejado geográficamente, pero tan próximo en la huella que ha dejado el arte islámico en la arquitectura e idiosincrasia de ambos territorios, algo que Leyla sigue explorando. Dice ensimismada que desde que llegó se ha preguntado por qué el cubismo se adscribe a los franceses. “¿Acaso fue Cezzane quien nació entre los poliédricos y aterrazados cubos de la arquitectura andalusí o fue Picasso?”, indica.

Si volvemos al autorretrato no hay lugar a dudas en cuanto a la destreza en el trazo en la figura humana a la que Leyla regresa asiduamente, aunque cada vez dice sentirse más atrapada por los paisajes de la comarca, su luz y su fuerza, que le hacen inclinarse por enormes lienzos repletos de naturaleza en estado puro, cuya belleza, como dice la artista, la vista no alcanza a enmarcar. Leyla nos recuerda de hecho que, no es la única artista que llegó a Villena por casualidad y quedó prendada de su entorno a la hora de trabajar como artista. Esa atracción por la zona que ya experimentaron artistas venidos de Japón o Alemania le da un aire bohemio a la localidad de la que sin embargo la misma no es consciente. El casco antiguo, los colores de las fachadas, los laberínticos callejones que conducen al castillo, dotan a este municipio de un encanto natural que la mirada de esta artista ha reconocido y ha empezado a querer.

Como vecina de Villena con su atellier ubicado en el casco antiguo como parte del magnetismo del barrio, Leyla ha planteado muchas veces la posibilidad de crear un espacio exclusivo para las artes plásticas donde hubiera lugar a la formación con la creación de la facultad de Bellas Artes. Con estudios postdoctorales, un mural escultórico de 30 metros en Murcia, y entre los proyectos más recientes, una monografía artística a punto de ser publicada y una escultura funcional que está prevista como parte del futuro Museo Antropológico de Villena, Leyla plantea la necesidad de hacer visible el trabajo de los artistas del municipio, dando a su vez la oportunidad a las futuras generaciones de formarse de la mano de profesionales como ella. Su idea fue proponer la creación de una galería municipal permanente donde se recogieran los trabajos de los grandes maestros de la comarca, desde Navarro Santafé hasta Ceferino Moreno, gran artista villenense, cuyas obras se pueden ver en el Museo Reina Sofía entre otros, pero también gran comisario español de arte en las bienales de Venecia, Sau Paulo, Valparaíso o Alejandría durante los años setenta, bienal esta última por cierto, en la que el padre de Leyla, el escultor Alija Kucukalic, ganó el Gran Prix, de la mano casualmente del gran Moreno. Los vecinos del municipio merecen conocer de cerca el trabajo de sus artistas, comenta Leyla.

También ha propuesto la creación de una colonia artística que avive el municipio y ofrezca a los artistas de fuera la posibilidad de conocer Villena y su comarca, abriendo así el camino a un intercambio de corrientes creativas que podría ser uno de los mayores atractivos de la localidad como ocurre en otras ciudades como Pocitelj en Herzegovina que Leyla conoce muy de cerca. Dónde han quedado todas esas propuestas es una pregunta que también se hace la propia artista que remarca que las mismas surgen del entusiasmo y del amor por el arte, y siempre han sido trasladadas de esta manera a los responsables de turno, sin adscripción política alguna.

Estas ideas precisamente se recogieron  el pasado 14 de noviembre en la conferencia de la Comisaria de exposiciones de arte contemporáneo, Rosalina Hernández, que organizó Artekarana y en la que se reivindicó un espacio para las artes plásticas. Leyla, como ferviente defensora del potencial artístico de Villena y miembro de Artekarana comenta que ya en los años setenta con un artista de la talla de “Ceferino”, el municipio podría haberse convertido en un referente para el arte contemporáneo. Espera que en este caso, la idea cristalice en un proyecto serio desde la administración. “Si esta localidad es capaz de organizar cada año un evento de las dimensiones de las fiestas de Moros y Cristianos, cómo no va a poder dar su merecido lugar al arte”, sentencia. 

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