No era agua para todos. Fue dinero para algunos

El famoso y repetido “Agua para todos”, se convirtió al final en “Dinero para algunos”, porque nada menos que 7,2 millones de euros destinó la Generalitat durante 8 años a la Fundación Agua y Progreso, en la que tuvo un papel relevante el villenense Andrés Martinez.

Esta fundación fue un instrumento de propaganda a favor del trasvase del Ebro, hasta que Mariano Rajoy ganó las elecciones a finales de 2011 con un programa que ya no recogía la reivindicación de esa obra hidráulica.

Estos son los datos que el vicepresidente de la Generalitat, José Ciscar, ha dado al diputado socialista Francesc Signes, en respuesta a una pregunta en tal sentido. Para este diputado la campaña “Agua para todos”, no fue más que “un arma de agitación controlada totalmente por el PP y basada en una gran mentira, la de un trasvase del Ebro que sabían perfectamente que era inviable”.

La fundación no solo recibió millones de la Generalitat, sino que otras instituciones controladas por el PP, como las diputaciones provinciales, hicieron aportaciones para su funcionamiento, recibiendo en total más de un millón de euros cada año.

Por cierto, a la Fundación Agua y Progreso la Generalitat “no les debe nada, ni un euro”, según Signes, en referencia a que el Consell ha satisfecho todos y cada uno de sus compromisos con esta fundación. El diputado socialista y, por supuesto, los socialistas de Villena, queremos saber en qué se gastaron los 7,2 millones de euros. Para ello, Signes ha presentado nuevas preguntas en las que reclama copia completa de los expedientes con los que se justificó cada subvención, así como de los informes y resoluciones emitidos por los servicios administrativos y económicos de la Generalitat.

Con mucho menos que esos 7 millones de euros se podrían haber solucionado los problemas de la depuradora de aguas residuales de Villena, y se podrían haber mejorado las infraestructuras hidráulicas del postrasvase Júcar-Vinalopó. Para el diputado socialista, esos fondos públicos se usaron para hacer propaganda de un trasvase, el del Ebro, “que el PP sabía que no podía llevarse a cabo, aunque solo fuera porque estaba condicionado a la ejecución del denominado pacto del agua de Aragón, que garantizaba 600 hectómetros cúbicos a esa zona antes que plantearse cualquier otra transferencia hídrica. Agua y Progreso gastó más de siete millones de euros en engañar a los habitantes de la Comunitat Valenciana y enfrentarlos a otras comunidades autónomas.

No estaría mal que en Villena, quienes tuvieron una participación tan importante en esta fundación, dieran ahora la cara y nos contaran en que gastaron ese dinero, reconociendo que todo fue una campaña de agitación política para beneficiar electoralmente al Partido Popular.