El V centenario del arcedianato de Santiago arranca con la inauguración de la sacristía

Villena celebra este año el quinto centenario de la designación del arcedianato de Santiago por el Papa Julio II. Esta celebración tal y como ha señalado la alcaldesa de Villena, Celia Lledó, arranca con la inauguración de la sacristía y sala capitular de la iglesia, por parte de la  Consellera de Turismo, Trinidad Miró.

La restauración de esta zona de la iglesia de Santiago se ha sufragado íntegramente por la Consellería de Cultura con una inversión de casi 300.000 €, con unos trabajos que se han prolongado durante más de seis meses.

La consellera ha insistido en el valor de la iglesia de Santiago,  “uno de los conjuntos gótico renacentistas más importantes del territorio valenciano”. Y la apuesta de la administración valenciana por su conservación, de ahí que junto a la rehabilitación de la sacristía y sala capitular se haya restaurado las fachadas de la casa parroquial y las obras de accesibilidad, con una inversión de 58.449 euros ejecutada a través de la Dirección General de Patrimonio Cultural Valenciano de la Conselleria de Cultura.

Por su parte, Celia Lledó, ha agradecido la presencia de la consellera de Cultura y ha realizado una mención especial a Enrique Hernández, anterior presidente de la Asociación de Amigos de Santiago, “ya que la restauración de la iglesia ha sido fruto de su insistencia y tesón”.

Las labores objeto de este proyecto han consistido principalmente en la limpieza de las fachadas interiores, reposición de los elementos que faltaban o que estaban muy deteriorados, eliminación de las piezas de madera incrustadas en los sillares, que actuaban como sujeción del mueble de madera existente en la Sacristía, así como los restos de morteros y adherencias ajenas a la piedra con el fin de recuperarla. Significativa ha sido la recuperación del color azul original de los techos de la sacristía.

La Iglesia de Santiago fue construida a finales del siglo XV, bajo el auspicio del Papa valenciano Alejandro VI, y el patronazgo de Sancho Garcia Medina. La ampliación se prolongará hasta el siglo XVI con Pedro García de Medina, quien concluyó la obra